con la participación de los ex pobladores de la Villa: María Caceres, Antonieta Miranda, Ximena Salinas, María Aravena, Jovita Sandoval, Graciela Gómez, Adela Bustamante, Jimena Mendez, Bernarda Reyes, Miguel Manríquez, Mirna Parada, Olga Rojas, Aidé Contreras, Rosa Vargas, Olga Barriga, Margarita Monges.
Expropiación neoliberal, devastación urbana, arquitectura de la destrucción, desalojo, desposesión, son conceptos que hemos observado en exceso hace varias décadas... La Villa San Luis es un lugar emblemático, no solo por el gran proyecto llevado a cabo por el gobierno de Salvador Allende, como un ejemplo de vivienda social, que intentaba terminar con la segregación socioeconómica, sino lamentablemente también como una zona de sacrificio por medio del saqueo, perpetrado por la dictadura militar y los grandes empresarios. Práctica que se repite hasta nuestros días de diversas formas en otras comunas o regiones del país.
Esta violación al derecho a la vivienda, permanece impune y encubierta en manos del crecimiento neoliberal, que expropia en nombre del uso rentable y del lucro, entregando predios y construcciones a la oferta y la demanda del libre mercado.
Anular, disminuir, borrar la memoria histórica es una de las armas más eficaces del dominio capitalista, que intenta una vez más terminar con este legado arquitectónico de la Villa San Luis, para que no hayan huellas, para que no haya reflexión.
En la vereda de la Villa San Luis aparecen algunos pobladores puestos en hilera, separados a cierta distancia, mirando hacia el cerco de la Villa. Se quedan quietos y yo me acerco a cada uno de ellos, en ese momento yo volteo a esa persona hacia los transeúntes y voy cortando con una tijera un rectángulo proporcional a sus viviendas, en sus ropas, a la altura del pecho. Esta segunda piel es arrancada de sus cuerpos en plena calle Urano, donde aún se yergue el último de los edificios.
Asesora, relacionadora publica, comunicaciones: Javiera Martínez
Asesor arquitectónico/urbano, comunicaciones: Fernando Toro Cano
Asesora Legal: María Fernanda Toro Cano
Prensa: César Baeza
Asistentes: Tamara Contreras, Atrin Ayazi, Daniela Cornejo
Asesor diseño y apoyo técnico: Sven Hahne
Documentación fotográfica: Marucela Ramírez, Marcela Araya
Documentación de video: Andrés Martinoli, Manuela Piña
